Wednesday, May 30, 2012

POCO, MUCHO O NADA






Infundes un terreno infértil
lleno de angustias y sobresaltos
y esta sed que rompe
con el dueño de la próspera
constancia de lo mucho,
naciente sombra
que respira y da sus tumbos,
bajada amarga
sin frenos ni parada.

Husmea de un porrazo
la ambición desmedida
en la cumbre de la abundancia
y no se encuentra nada,
rastrea la desesperación
en cada rincón,
desde todos sus horizontes,
y amanece el sol sin provisión,
con tan solo el vestigio,
de la nada y su sabor.

Huele a lluvia
que trasciende los límites
de lo poco de un escaso misterio,
y se convierte en el balance
perfecto y sublime
de lo mucho o de lo poco,
cantidad y calidad,
un despliegue de virtudes
bendición inesperada,
un caudal de sentido,
a una sensible movida
del viento al soplar,
un derroche de caricias
abrazadas por el tiempo.

Colmo de graneros
que asaltan la sonrisa,
¿dónde está tu parte
en el entierro senil
de tu vil esclavitud?,
cadena de injusticias,
provisora de maldad,
¿a quién le toca demostrar
el lecho de martirios
y reponer la saciedad
en el frío roce
de la oculta sobriedad?.

Llena sin cesar
hasta el tope de lo último
el saco roto
de intolerantes desechos,
basura esparcida
en el loor de tu lecho,
clava el puñal en mi pecho,
sin apretar demasiado,
¡qué salga el sol para todos!
en su justa proporción,
¡que siga corriendo la hora!,
sin desajustar el reloj,
¡que llueva a cántaros en la roca
sobre el linaje de Dios,
cambiando las ganas de ahogo
por la abundante proporción,
¡qué se colmen las ventajas
y sumen los beneficios !,
¡qué no falte nada
ni a sombra ni a pico!.
Sabiendo que en lo poco
puedo serte fiel,
y en lo mucho también,
pero en la nada
nadie sueña
y solo revienta el vagazo
de las sedientas palabras.